EN COLABORACIÓN CON AGUIRRE & NEWMAN ARQUITECTURA: Angel Serrano y Juan Jose Martín.
COLABORADORES ENGUITA & LASSO DE LA VEGA: Enrique Azpilicueta, Bárbara Ortiz y Teresa Torrijos.
INGENIERÍA DE ESTRUCTURAS: FHECOR. Hugo Corres y Eduardo Romero
INGENIERÍA DE INSTALACIONES: FSL Ingeniería. Manuel López Acosta
Para la rehabilitación del edificio se proponen, entre otros cambios, sustituir el actual muro cortina por una fachada revestida con una piel bioclimática que permite combatir activamente la contaminación atmosférica, una fachada que descontamina y limpia el aire. Se trata de una doble piel con una hoja interior de cristal extra-claro muy transparente, y una hoja exterior de paneles textiles metalizados, con propiedades fotocatalíticas, desarrollado para la industria aeroespacial
La nueva fachada está dividida en diferentes planos que aprovechan la forma hexagonal de la planta para adelantarse o retranquearse dotando al edificio de mayor esbeltez y aumentando su sensación de flotación. La subdivisión permite especializar el filtro solar en cada una de las fachadas, en virtud de su grado de insolación.
Con el fin de optimizar el espacio disponible se propone dividir el núcleo unitario en dos núcleos de diferentes características, haciendo desaparecer el gran vestíbulo de cada planta tipo, lo cual aumenta la superficie de total oficinas. Al trasladar las instalaciones que están en el interior al perímetro exterior del edificio, es posible incorporar un suelo técnico y obtener una altura libre máxima en la totalidad de las plantas tipo. Esta estrategia permite ver los techos completos de planta, recuperando así los valores tectónicos del interior del edificio y el concepto espacial con el que fue concebido.